Para ser feliz hay que fortalecer el autoestima
No lograremos ser felices ni solos ni acompañados, si no cuidamos nuestra autoestima
El equilibrio con el entorno se manifiesta sólo si aprendes a respetarte, valorarte y amarte a ti primero.
¿Qué es entonces la autoestima?
Es la capacidad que tenemos de querernos, valorarnos y respetarnos, englobando a su vez el conjunto de emociones, sentimientos, ideas y pensamientos que tenemos hacia nosotros mismos.
Si piensas que tu felicidad depende de otro, o de las circunstancias entonces te encuentras desde la dependencia emocional lo que nos mantendrá alejado de la felicidad.
La muerte de un familiar, un desengaño amoroso, conseguir el puesto de trabajo que tanto deseábamos o una situación inesperada, todo puede afectarnos.
Abrahan Maslow, en su jerarquía de las necesidades humanas, describió la autoestima como esa dimensión que se construye desde dos focos muy concretos. El primero es la apreciación por uno mismo y el segundo, el respeto y estimación que se recibe de otras personas.
Aquí radica entonces la importancia de trabajar primero en uno mismo desde la conexión con el amor propio para poder así conectar con el bienestar y la felicidad.
Ser feliz es sentirse en paz y en sintonía con todo nuestro alrededor. Se nos dificulta serlo por el desorden en nuestros pensamientos, la educación recibida y las experiencias no tan satisfactorias que en ocasiones nos da la vida, lo que influyen en la forma de valorarnos. Si lo enfocamos desde lo negativo no conseguiremos ser felices.
¿Dónde ocurre el gran problema?
Cuando otorgamos el poder de sentirnos bien a los demás y a las circunstancias. De esta forma abrimos la puerta a la inseguridad y en definitiva, al malestar y al sufrimiento. Dejar de creer en nosotros, olvidar cuánto valemos y, sobre todo, no priorizarnos es una peligrosa trampa
Un ejemplo de ello lo podemos observar a través de las relaciones de pareja donde uno de los miembros posee el autoestima debilitada, el resultado crisis emocional, dado que quien está en esa situación se siente inferior y espera que el otro compense ese vacío, situación que nunca podrá ser cubierta por el otro, si no por quien la padece.
¿Cuál es entonces la solución?
¿Cómo podríamos protegernos de la dependencia, las relaciones tóxicas y el miedo? Con el amor propio y la conexión con la divinidad. Sólo cuando nos valoramos y dejamos de vernos como el centro del universo, disponemos de ese fuerte sostén al que podemos agarrarnos cuando se desmorona nuestro alrededor.
EL AMOR PROPIO ES EL ANTÍDOTO CONTRA LA INFELICIDAD
Puede interesarte leer ¿Cómo influye el amor propio en nuestras vidas?
Claves para ser feliz aumentando el autoestima.
- Priorízate, mantenlo presente.
Si partimos de la frase “nadie puede dar lo que no tiene” eso nos señala que para poder valorar, amar, respetar ser feliz con el otro, primero tienes que tenerlo visible en ti.
Soltar el miedo a ser rechazada, criticada, abandonada por priorizarte es necesario, ya que así podrás revertir cada pensamiento aprendido desde esa dependencia emocional. Ten presente que nadie puede dañarte emocionalmente si tu estas en conexión con tu amor propio.
Puede que en algún momento consideres que eres egoísta por priorizarte, pero si lo haces desde una posición realista, si no practicas una excesiva admiración por ti, no hay nada que temer. No hay nada negativo en quererse, en tenerse en cuenta. El problema está en creerse perfecto y poseedor de la verdad
- Elige ser feliz
La felicidad es una elección de vida, depende de cada persona.
Esta idea expone que los problemas de muchas personas está en que se desprecian, en que no se aman. Son personas que no aprecian valor en ellos mismos y no se sienten merecedores de ser amados. Esta mirada es aterradora. Al no tener estima por ti, quedas en manos de otras personas y de las circunstancias ¿Puede existir algo peor que esto?
También es cierto que gran parte de nuestra infelicidad surge también en el ámbito relacional. A menudo, permanecemos en bucles de sufrimiento donde no vemos la salida. Por ello, debemos chequearnos de vez en cuando para saber cómo nos encontramos. Y si nos sentimos mal, tener en cuenta que existe algo en nosotros a lo que debemos prestar atención para transformarlo.
Tener presente que el escapar del malestar o de esperar que los demás nos fortalezcan la autoestima, sino de poder aceptarnos y danos todo el amor que necesitamos. Porque si ignoramos cómo nos sentimos, lo único que haremos será alimentar nuestro malestar.
LA ACEPTACION DE UNA MISMO ES LA CLAVE PARA SER FELIZ
https://yuraimasuarez.com/aceptacion-clave-para-ser-feliz/
Bajar el estándar de exigencia hace que comprendamos que la vida siempre es mejor si la simplificamos. Por lo tanto, si queremos aumentar nuestra autoestima no hay nada mejor que ir acumulando pequeños triunfos cotidianos. Para ello, podemos proponernos una serie de objetivos al día o a la semana que tengan que ver con priorizarnos usando palabras potenciadoras cumplirlos.
Te invito a una sesión de coaching personal para ayudarse a aumentar tu autoestima